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Como los muros de un baluarte
espeso de verdor
los árboles circundan el jardín
por los cuatro costados.
Aquí nacen las palabras
sin quererlas
sin pensarlas
y nacen tan solo para mí
las palabras que nadie podría refutar.
Pues son esas palabras lo que soy.
El cielo está ciego
u hoy día muy lejano.
Mas las flores de este mi jardín
satisfacen cualquier ansia.
♣
© 2014
Lino Althaner
Oct 27, 2014 @ 06:08:55
¡Una preciosidad de poema! Las flores necesitan de una musicalidad para crecer. Y las palabras que nos llegan sin esperarlas, nos disparan al corazón y seducen la razón como un inspirador beso matutino.
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Oct 30, 2014 @ 18:37:42
Un comentario muy inspirado. Te lo agradezco
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Nov 03, 2014 @ 16:07:12
Muy bello… e inspirado!
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Nov 05, 2014 @ 12:41:03
Muchas gracias, Bárbara. Aprecio especialmente tus visitas. Felicidades.
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